Cirugía laparoscópica
La cirugía laparoscópica ha revolucionado la cirugía en los últimos años. Se consiguen los objetivos quirúrgicos y a su vez se reducen los grandes inconvenientes de la cirugía clásica con incisiones más pequeñas, menos dolor. Menos sangrado, menos complicaciones y reincorporación a la vida habitual de forma más rápida.

Principales ventajas
- Disminución del dolor postoperatorio inmediato y a largo plazo ya que se sustituyen grandes incisiones por pequeñas incisiones muchas de las cuales no precisan siquiera cierre con puntos.
- Menor riesgo de infección. Las heridas quirúrgicas son más pequeñas por lo que cicatrizan rápidamente y rara vez presentan complicaciones.
- Mejor estética al ser pequeñas incisiones.
- Menor tasa de sangrado durante la intervención.
- Rápida recuperación. Todas las series demuestran que la laparoscopia permite postoperatorios más cortos en el hospital y posteriormente, en casa, se recuperan antes.
Aplicación de la laparoscopia en urología
- Prostatectomía radical laparoscópica (extirpación de la próstata).
- Nefrectomía parcial o radical laparoscópica (extirpación parcial o total del riñón).
- Cistectomía radical laparoscópica (extirpación de vejiga).
- Pieloplastia laparoscópica por estrechez de uréter.
- Suprarrenalectomia laparoscópica (extirpación de la glándula adrenal o suprerenal).
- Cirugía reconstructiva por laparoscopia.

